martes, 21 de abril de 2015

ANA BELÉN HUNGRÍA


Lugar y fecha de nacimiento: Madrid, 1974
Formación académica: Licenciada en Ciencias Químicas por la Universidad Complutense de Madrid y doctora en el Programa de Química Física Aplicada por la Universidad Autónoma de Madrid 
Líneas de investigación: Aplicación de técnicas de caracterización basadas en la Microscopía Electrónica de Transmisión para la caracterización de distintos catalizadores, principalmente nanopartículas metálicas (Au, Ru, Pd...) soportadas sobre óxidos (CeO2, CexZr1-xO2, SiO2, TiO2) para su aplicación en distintas reacciones de interés medioambiental. Lo más espectacular de un microscopio electrónico es que con en las imágenes que se obtienen se puede analizar la composición y la estructura de partículas que miden un par de nanometros (la millonésima parte de un milímetro) y que en muchas de ellas pueden verse planos atómicos e incluso columnas atómicas individuales.

La importancia del trabajo realizado por esta investigadora se puede comprender al leer los premios y becas recibidas a lo largo de su trayectoria, no solo ya como profesional, sino también desde su último año de formación universitaria: 

· Beca de Colaboración en el Departamento de Química Inorgánica de la Universidad Complutense de Madrid durante el último año de Licenciatura (Septiembre 2008- Junio 2009).
· Beca de Formación de Personal Investigador de la Comunidad de Madrid para la realización de la Tesis Doctoral en el Instituto de Catálisis y Petroleoquímica del CSIC (Septiembre 1999- Septiembre 2004).
· Beca Postdoctoral del Ministerio de Educación y Ciencia para la realización de una estancia Postdoctoral en la universidad de Cambridge (Junio 2005 – Diciembre 2005)
· Beca Marie Curie de la Europea para realizar una estancia Postdoctoral en la Universidad de Cambridge (Enero 2006 – Diciembre 2007)
· Desde Febrero de 2008 es Investigadora Contratada Ramón y Cajal en la Universidad de Cádiz.
· Premio JEOL a la Mejor Tesis Doctoral realizada en el área de Materiales (2005).
· Beca Loreal-Unesco For Women In Science, dotada con 15000 euros en Noviembre de 2014.

Como ya hemos visto, las estancias de formación en el extranjero para cualquier investigador son fundamentales en su preparación profesional. El caso de Ana Belén Hungría no es ninguna excepción :

· Estancia predoctoral en la Universidad de Dundee (Escocia) (durante 2001).
· Estancia predoctoral en National Center for Electron Microscopy del Lawrence Berkeley National Laboratory, (septiembre-noviembre de 2003).
· Estancia Postdoctoral en la Universidad de Cambridge (junio de 2005 a diciembre de 2007).


Ana Belén Hungría ha tenido la amabilidad de responder algunas preguntas para la Ciencia en Femenino:

Usted es doctora en Ciencias Químicas, ¿qué le llevó a realizar estos estudios? ¿lo tenía claro desde el principio o tomó la decisión al llegar a 2º de bachillerato?
Ana Belén Hungría: Desde muy pequeña me gustaban mucho las ciencias, en el colegio las matemáticas y luego también la química en el instituto. No tenía claro que fuera a estudiar química, pero sí me decantaba claramente por las ciencias, pues me resultaban más amenas.

La conciliación familiar parece ser el gran caballo de batalla en la relación Ciencia-Género, ¿la conciliación entre la familia y la investigación es una utopía en la España actual? ¿qué debe cambiar? 
Ana Belén Hungría: Queda mucho por avanzar en España en el tema de conciliación, tanto en investigación como en muchos otros ámbitos. Tenemos que concienciarnos de que para tener una vida plena hay que buscar un equilibrio entre la vida familiar y laboral, tanto hombres como mujeres. Las instituciones tienen que facilitar esta conciliación para aquellos trabajadores que lo soliciten. Hay momentos en la carrera profesional de un científico en los que hay que hacer grandes sacrificios personales como estancias en el extranjero, asistencia a congresos, experimentos que requieren largas horas en el laboratorio, etc. Cuando una persona, hombre o mujer, tiene obligaciones familiares como es el cuidado y la atención de hijos pequeños, es imprescindible la cooperación entre los dos miembros de la pareja en la medida de lo posible para que ambos puedan desarrollar su faceta profesional si ese es su deseo.

Parece que todo lo que lleva escrito la palabra química tiene connotaciones negativas (referidas fundamentalmente al medio ambiente). Sin embargo, trabajos como el suyo desmienten este aspecto o toda la línea de trabajo de la Química Verde. ¿A qué se cree que se debe esta “mala fama” de la Química?
Ana Belén Hungría: Creo simplemente que es un mal uso de la palabra química, supongo que en un principio por abreviar. Estamos rodeados de compuestos químicos, algunos de ellos son buenos para el medio ambiente y para la salud, y otros son malos para el medioambiente y/o la salud. Cuando se dice que un producto tiene muchos “químicos” se está dando a entender que son compuestos malos, pero deberíamos pensar que el agua es un compuesto químico, el oxígeno que respiramos es un elemento químico, las medicinas que nos curan son compuestos químicos, la ropa que llevamos y los componentes de nuestros ordenadores y teléfonos móviles están formados por compuestos químicos que alguien ha investigado y desarrollado para determinadas aplicaciones que nos permiten vivir el tipo de vida que llevamos hoy en día.

¿Cree que los intereses económicos de las grandes petroleras es un factor determinante para que no se invierta en otras fuentes de energía más sostenibles como el hidrógeno?
Ana Belén Hungría: No estoy muy al tanto de cómo se mueven los intereses económicos a tan alto nivel, pero no es difícil imaginar que a las petroleras les interesa continuar con un negocio que les es tan rentable hasta al menos ir agotando las reservas de petróleo que hay. Cuando estas reservas vayan disminuyendo y las investigaciones que se están llevando a cabo en múltiples laboratorios del mundo empiecen a ofrecer alternativas claramente viables, las petroleras comenzarán a invertir fuertemente en el desarrollo y explotación de estas fuentes alternativas.

El informe She Figures 2012, sigue poniendo de manifiesto la clara discriminación de la mujer en la Ciencia. ¿Cree que términos como Techo de Cristal y Suelo Pegajoso siguen siendo completamente válidos en la Ciencia para las mujeres? ¿hay más palabras que hechos?
Ana Belén Hungría: La realidad es que en Ciencia la tendencia es la misma que en otros ámbitos de nuestra sociedad, es decir, no veo que en Ciencia haya una discriminación mayor que en política o en la empresa privada, por ejemplo. Creo que es un problema común, con lo que no quiero por supuesto restarle importancia. La realidad es que aunque hay un mismo número de mujeres que terminan los estudios superiores y realizan un doctorado, pero la proporción de mujeres catedráticas o, por ejemplo, jefas de grupo es mucho menor. Como dije anteriormente, y quizá por mi situación personal actual como madre de dos hijos pequeños, creo que favorecer la conciliación desde el ámbito familiar por supuesto, y también el laboral es imprescindible. La sociedad, las empresas y las Universidades tienen que entender que una mujer en una determinada edad va a poder dedicar menos horas a su trabajo para ser madre, y a partir de ahí para criar a sus hijos. Esta carga, si es compartida con su pareja, tendrá menos impacto en su vida laboral. Además si tanto hombres como mujeres concilian su vida familiar con la laboral, no se obstaculizará la promoción de mujeres por el mero hecho de serlo, pues sus compañeros hombres estarán haciendo lo mismo. 

Parece que el futuro investigador en España es muy incierto, ¿qué espera usted al respecto? 
Ana Belén Hungría: La carrera investigadora en España siempre ha sido una carrera de obstáculos, debido a la escasa financiación que provocaba precariedad e inestabilidad en los primeros años hasta que el investigador conseguía un puesto permanente. Este hecho se ha visto agravado con la actual crisis económica, en la que se ha recortado en inversión I+D. Ahora mismo es más difícil que un estudiante que finalice una carrera pueda empezar una tesis doctoral, pues hay menos becas y menos proyectos para financiar estos estudios. Una vez que se acaba la tesis es difícil encontrar un puesto como investigador postdoctoral, incluso para aquellos que realizan estancias postdoctorales en el extranjero que les han permitido aprender técnicas nuevas y mejorar el currículum, y por supuesto, es mucho más complicado estabilizar a los investigadores. La única esperanza es que el gobierno cambie su política y aumente su inversión en I+D, que sea consciente que cuanto más invierte un país en investigación, más riqueza se generará a medio y largo plazo y más culto será dicho país.

Por último, aquí os dejamos un vídeo, del programa Historia de Luz, donde la propia Ana Belén Hungría explica en qué consiste su trabajo de investigación:




No hay comentarios:

Publicar un comentario